Cómo prevenir las caídas en personas mayores

En este post vamos a hablar sobre la importancia de la prevención de las caídas en las personas mayores, las causas que las propician y cuáles son las mejores estrategias para evitarlas. 

Las personas de edad avanzada tienen más facilidad para caerse. De hecho, tres cuartas partes de las caídas se producen en personas mayores de 65 años, y son una de las principales causas de traumatismo. Generalmente, una caída no pone en riesgo la vida, sin embargo, puede causar fracturas o lesiones importantes que supongan una merma de la calidad de vida de la persona afectada, no solo por sus consecuencias físicas, sino también por las psíquicas y sociales. Además, una persona que ya se ha caído, tiene más probabilidades de volver a sufrir una nueva caída^1-5.

Importancia de la prevención de las caídas en las personas mayores

Las caídas son acontecimientos involuntarios en los que la persona pierde el equilibrio y su cuerpo golpea contra el suelo u otra estructura. Aunque no suelen ser mortales, a menudo presentan complicaciones, como fracturas o heridas importantes que pueden limitar los movimientos o requerir una intervención quirúrgica y, como consecuencia, un deterioro funcional y una pérdida de confianza en sí misma de la persona afectada, lo cual puede influir en que deje de querer hacer sus actividades de ocio habituales^2-4.

Por otro lado, la disminución de la actividad durante el periodo de recuperación reduce la movilidad y merma la fuerza muscular y articular. Esta debilidad, incrementa el riesgo de volver a sufrir una caída².

Las caídas pueden estar propiciadas por factores externos, como una irregularidad en el terreno, o factores internos, como un malestar físico o un mareo. Cuando una caída se produce a causa de un elemento externo no hay síntomas previos, mientras que cuando se debe a algún factor físico puede ir precedida de síntomas como²:

• Mareos.
• Palpitaciones rápidas o irregulares.

Factores de riesgo de caída en personas mayores²

Las caídas de las personas mayores a menudo se deben a un tropiezo o una pérdida del equilibrio en casa, al levantarse del sofá o de la cama, al ir al servicio o al subir o bajar escaleras, especialmente si realizan movimientos rápidos, si están despistadas o si existen riesgos en el entorno, como una mala iluminación o un suelo irregular. Además de estos factores, las caídas también pueden estar propiciadas por:

• Problemas de equilibrio.
• Falta de visión.
• Poca sensibilidad, sobre todo en los pies.
• Escasa masa muscular.
• Deterioro de las capacidades cognitivas.
• Hipertensión arterial y problemas cardiacos.
• Medicamentos que alteran la capacidad de atención, por ejemplo, analgésicos opiáceos, antidepresivos y ansiolíticos, antihipertensivos o diuréticos.

Estrategias para la prevención de las caídas en las personas mayores^1,2,4

Cuando se trata de evitar las caídas, en general, las condiciones físicas de la persona son más importante que las características del entorno. Para ayudar a prevenirlas, se recomienda tener en cuenta las siguientes medidas:

• Practicar ejercicio a menudo: combinar ejercicios de fuerza, de resistencia y de equilibrio, como el taichi, puede ayudar a mejorar el equilibrio y a fortalecer las piernas.
• Utilizar un calzado adecuado: conviene optar por zapatos planos, con una buena sujeción del pie y suela antideslizante.
• Adaptarse a los cambios de posición: incorporarse despacio para prevenir los mareos. 
• Realizar la maniobra de Epley: se trata de una maniobra simple que consiste en movimientos específicos de la cabeza que permiten evitar el vértigo postural y los mareos.
• Revisar la medicación: comprobar que los medicamentos que se toman no tienen efectos secundarios que aumenten el riesgo de caídas.
• Revisar periódicamente la vista: para confirmar que la graduación de las gafas es la adecuada y que no existen afecciones visuales, como cataratas o glaucoma.
• Visitar a un fisioterapeuta: estos profesionales pueden ayudar a los mayores a mantener una buena postura para caminar y enseñarles a utilizar los dispositivos de asistencia, como bastones y andadores.
• Comprobar que la casa está en buenas condiciones: verificar que la iluminación es suficiente, que los suelos no resbalan, que las alfombras están bien sujetas o disponen de una superficie antideslizante, que no hay cables eléctricos por el suelo en las zonas de paso, etc. 
• Suplementar, si es necesario, la vitamina D: esta vitamina contribuye a fortalecer los huesos y articulaciones, y a evitar la pérdida de masa muscular.
• Consultar a un médico: en caso de notar mareos, pérdida de visión o irregularidades cardiacas.

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Referencias:

¹Prevención de caídas en ancianos. Clínica Universidad de Navarra. Consultado en junio, 2023. 

²Caídas en personas mayores. Manual MSD. Abril, 2021. 

³Caídas en la población anciana española: incidencia, consecuencias y factores de riesgo. Elsevier. Diciembre, 2015. 

⁴Caídas. OMS. Abril, 2021. 

⁵Síndrome post-caída en adultos mayores operados de fractura de caderas. Scielo. Septiembre, 2020.