Día Mundial de la Meningitis. Qué es, causas y prevención

En este post vamos a explicar qué es la meningitis, cuáles son las causas de esta enfermedad y qué síntomas pueden hacer sospechar que alguien de tu entorno la padece.

Con motivo del Día Mundial de la Meningitis, 24 de abril, queremos dar a conocer una enfermedad que cada año afecta a mil personas en España. Una infección que afecta principalmente a niños y jóvenes pero que puede darse en cualquier edad¹.

La meningitis es una enfermedad caracterizada por la inflamación de las meninges, es decir, de las membranas que rodean el sistema nervioso central, tanto en el cerebro como en la médula espinal^1,2. Esta inflamación puede deberse a distintas razones, lo más común es que se produzca por infecciones¹.

Causas de la meningitis

Las causas más frecuentes por las que se produce la meningitis están relacionadas con:

Virus

Las meningitis víricas suelen curar solas con el paso de lunas semanas, aunque pueden tener diferentes consecuencias según el tipo de virus². Normalmente, en los países occidentales la meningitis está provocadas por el enterovirus, como el ECHO y Coxsackie, o por otros tipo de virus como el del herpes simple, el virus de la inmunodeficiencia humana, el virus de varicela-zóster o el virus del Nilo Occidental, que afectan especialmente al final del verano o principios del otoño, entre otros³. Según el tipo de virus, puede transmitirse a través del torrente sanguíneo, por el contacto con heces contaminadas, a través de relaciones sexuales, picaduras de algunos insectos, por inhalación del virus o por contacto con alimentos contaminados o agujas infectadas⁵.

Bacterias

Este tipo de meningitis es más grave y puede llegar a ser mortal si no se trata a tiempo. Aunque la mayoría de personas se recuperan, la infección bacteriana puede provocar discapacidades permanentes. Esta infección generalmente se transmite de persona a persona, aunque también puede ocurrir a través de ciertos microorganismos de los alimentos o a través de una infección cercana, como puede ser en el oído, una fractura craneal o algunas cirugías^2,3.

La meningitis bacteriana es una urgencia médica y se debe tratar lo antes posible incluso antes de confirmar el diagnóstico.

Hay diferentes tipos de bacterias que pueden provocar esta infección³:

• Neumococo (Streptococcus pneumoniae): es la bacteria que produce meningitis más frecuentemente en bebés, infantes y adultos. Las manifestaciones más comunes y que pueden desencadenar una meningitis son neumonía, infección de oído o infección de los senos paranasales. La vacuna del neumococo puede prevenir este tipo de infección.
• Meningococo (Neisseria meningitidis): afecta principalmente a adolescentes y jóvenes adultos. Este tipo de bacteria causa infecciones en las vías respiratorias y provoca la meninigitis al llegar al torrente sanguíneo y alcanzar el sistema nervioso central. También se puede prevenir mediante las vacunas. A pesar de estar vacunado si se ha estado en contacto con un infectado, también es necesario tomar un antibiótico oral como medida preventiva.
• Haemophilus (Haemophilus influenzae): estas bacterias pueden causar diferentes tipos de enfermedades respiratorias, de los huesos, las articulaciones o el sistema nervioso. Hace unos años fue la principal causa de meningitis bacteriana en niños, pero gracias a la vacunación se ha reducido este tipo de meningitis.
• Listeria (Listeria monocytogenes): esta bacteria afecta principalmente a embarazadas, recién nacidos, adultos mayores y las personas con sistemas inmunitarios débiles. Puede encontrarse en quesos no pasteurizados, perritos calientes y carnes procesadas.

Hongos

Este tipo de meningitis es menos común y principalmente ocurre en personas inmunodeprimidas, como aquellas que han sido trasplantadas o están recibiendo quimioterapia².

Parásitos

Al igual que la fúngica, no es un tipo común de meningitis. Esta infección suele estar causada por las larvas de la tenia solium (cisticercosis). Puede contraerse por nadar en aguas dulces, aunque normalmente afecta más a personas que han consumido alimentos contaminados con la tenia³.

Meningitis crónica

Esta sucede cuando los hongos o la bacteria Mycobacterium tuberculosis, entre otros. Son micoorganismos de crecimiento lento que invaden las meninges y el líquido cefaloraquídeo. Las causas más frecuentes son, por lo tanto, infecciosas, autoinmunes y neoplásicas. Esta infección tarda habitualmente más tiempo en desarrollarse y dura cuatro semanas o incluso más, sus síntomas son similares al resto de meningitis³.

Además de por las causas ya mencionadas, la meningitis también puede aparecer por otras causas no infecciosas, como reacciones químicas, alergias a medicamentos o algunas enfermedades, como cáncer o enfermedades inflamatorias³.

¿Cuándo consultar al médico?

Los síntomas iniciales de la meningitis son similares a los de las infecciones víricas como la gripe y según el tipo desaparecen con los días, por lo que en ocasiones puede resultar difícil diagnosticar que se ha padecido esta enfermedad.

Pero en caso de sospecha, es necesario acudir al médico con urgencia para intentar paliar sus síntomas y evitar que pueda tener consecuencias a futuro¹. Se puede reconocer por síntomas como^1,2,3,4:

• Fiebre alta.
• Dolor de cabeza continuo e intenso.
• Vómitos.
• Convulsiones.
• Erupciones cutáneas (petequias) en algunas ocasiones. Las petequias son pequeños puntos rojos que aparecen cuando los capilares sangran y se derrama sangre en la piel. La manera de diferenciarlos de otras erupciones es que al presionarlos no desaparecen.
• Rigidez en el cuello o nuca.
• Sensibilidad a la luz (fotofobia).
• Estado somnoliento o confuso.

Además de los síntomas habituales, también se pueden padecer alteraciones de conciencia, ataques epilépticos u otros síntomas neurológicos².

¿Cómo se trata la meningitis?³

Para el diagnóstico de la meningitis es necesario el estudio del líquido cefalorraquídeo, que se obtiene a través de una punción lumbar. El tratamiento debe administrarse a la mayor brevedad posible, aunque en ocasiones y si el estado del enfermo lo permite, se pospone hasta realizar TAC o resonancia magnética cerebral.

Otras formas complementarias para diagnosticar esta enfermedad, es a través de hemocultivos, muestras faríngeas o muestras de heces.

En caso de que los médicos sospechen que padeces meningitis aguda de origen bacteriano, se te tratará urgentemente con un antibiótico intravenoso de amplio espectro, incluso antes de la punción lumbar. Una vez se conoce el diagnóstico final, se cambia el antibiótico al que se demuestre en el cultivo que es más efectivo.

¿Qué secuelas tiene la meningitis?

Si se realiza el tratamiento a tiempo se puede tener una recuperación sin secuelas³, pero uno de cada cinco pacientes que han tenido meningitis bacteriana puede tener secuelas de larga duración. Estas varían según la gravedad y el tiempo que se ha permanecido sin tratamiento. Algunas de las más comunes son la pérdida de audición, convulsiones, debilidad de las extremidades, problemas de vista, habla o lenguaje, la memoria y la comunicación. Aunque si su diagnóstico ha sido más tardío, puede tener consecuencias físicas más graves que afectan a las extremidades (amputaciones) o que provocan deformaciones debido a cicatrices^3,4

La meningitis es la primera causa de muerte por infección en niños y adolescentes, por lo que es fundamental saber reconocer sus síntomas y acudir a urgencias en caso de sospecha. Las vacunas son la mejor forma de lucha contra esta enfermedad¹.

Referencias:

¹ La mayor parte de los microorganismos que causan meningitis bacteriana en España disponen de vacuna para su prevención. Sociedad Española de Neurología. Abril, 2021.

² Meningitis. Clínica Universidad de Navarra. Consultado en febrero, 2022.

³ Meningitis. Mayo Clinic. Octubre, 2020.

⁴ Meningitis meningocócica. OMS. Septiembre, 2021.

⁵ Meningitis vírica. Manual MSD. Diciembre, 2020.

⁶ Meningitis bacteriana. CDC. Julio, 2021.