Efectos del ejercicio físico en nuestra salud y enfermedades que podemos prevenir

En este post te contamos cómo puede ayudarte el ejercicio físico a prevenir algunas patologías.

La Organización Mundial de la Salud describe la actividad física como “cualquier movimiento corporal producido por los músculos esqueléticos, con el consiguiente consumo de energía”. La actividad física mejora el bienestar general de las personas. De hecho, las que no realizan suficiente ejercicio tienen un riesgo de muerte de entre un 20 y un 30% superior a las que sí alcanzan el nivel recomendado¹.

Con respecto al nivel de actividad física que se aconseja, los adultos deben realizar entre 150 y 300 minutos semanales de ejercicio aeróbico moderado (caminar o nadar…) o entre 75 y 150 minutos de ejercicio aeróbico intenso (correr o montar en bicicleta), también semanalmente. Además, se deben hacer ejercicios de fortalecimiento muscular al menos dos días a la semana y las personas mayores de 65 años, es recomendable que realicen también ejercicios de equilibrio funcional. Asimismo, es importante señalar que es preferible hacer una cantidad insuficiente de ejercicio que no hacer ninguno¹.

Qué beneficios tiene el ejercicio físico

Hacer ejercicio físico de forma habitual tiene muchos beneficios para la salud¹:

• Mejora el estado respiratorio.
• Mejora el estado muscular.
• Mayor salud ósea.
• Menor riesgo de caídas y, en consecuencia, menos fracturas.
• Reducción del sobrepeso y la obesidad.
• Menos problemas de salud y enfermedades.

Qué enfermedades puedes prevenir haciendo ejercicio

Hipertensión arterial

El ejercicio físico fortalece el corazón y ayuda a que funcione mejor, ya que un corazón más sano es un corazón más fuerte y, en consecuencia, tiene que hacer menos esfuerzo para bombear la sangre. Además, hacer ejercicio de forma regular reduce el número de latidos por minuto (pulsaciones) de nuestro corazón y mejora el funcionamiento de las arterias, bajando así la tensión arterial y reduciendo el riesgo de tener hipertensión^2,3.

El peso tiene también una influencia importante en la presión arterial, y la actividad física ayuda a mantener un peso saludable. La práctica de ejercicio físico tarda entre uno y tres meses en ayudar a reducir la tensión de la persona que lo realiza y solo se mantienen los efectos positivos mientras se continúe haciéndolo, de ahí la importancia de generar un buen hábito mantenido en el tiempo².

Obesidad

Al ser un factor importante para mantenerse en un peso adecuado, el ejercicio es un aliado para evitar la obesidad y se recomienda practicarlo y fomentarlo desde la infancia. Las personas con sobrepeso no habituadas a la actividad física deben empezar poco a poco e ir aumentando el tiempo y la intensidad del ejercicio progresivamente y es aconsejable que consulten con su médico la mejor manera de hacerlo. En cuanto al tipo de actividad física para controlar el peso o reducirlo, el mejor es el que más motive a la persona a continuar practicándolo^3,4.

Diabetes tipo 2

Junto con la alimentación, la actividad física es clave en la prevención de la diabetes tipo 2. Y es que hacer ejercicio de manera regular mejora la resistencia a la insulina, que es clave en el desarrollo de esta patología. Además, diversos estudios científicos demuestran que las personas físicamente activas tienen menos diabetes tipo 2 que las que llevan una vida sedentaria. Lo ideal es intentar incrementar la actividad física de la vida diaria y, a eso, sumarle la realización de ejercicios aeróbicos (montar en bicicleta, caminar rápido, correr…), eso sí, teniendo en cuenta que las personas sedentarias deben evitar los ejercicios de alta intensidad al principio^3,5.

Dislipidemia

La dislipidemia (o dislipemia) es un aumento anormal de los niveles de lípidos y proteínas en la sangre. Pueden ser colesterol, triglicéridos o ambos. El ejercicio físico suele aumentar el colesterol HDL (colesterol bueno). Además, ayuda a controlar el peso corporal³.

Estrés

Prácticamente cualquier tipo de ejercicio ayuda a aliviar el estrés^2,6. Algunas de las ventajas que tiene el ejercicio en este campo son⁶:

• Un incremento de las endorfinas que ayudan a que nos sintamos bien.
• El alivio de los efectos del estrés en el cuerpo, como la tensión muscular, el dolor de cabeza o los problemas de sueño.
• Ayuda a mantener la concentración.
• Genera optimismo en las personas.
• Mejora el estado de ánimo⁶.

En definitiva, la actividad física es muy positiva para mantenerse en un buen estado de salud y ayuda a evitar distintas patologías… ¡Anímate a hacer ejercicio físico y deja atrás el sedentarismo! Recuerda que si tienes algún problema de salud, consulta con tu médico antes de empezar.

Referencias:

¹ Actividad física. Organización Mundial de la Salud. Consultado en enero, 2022.

² Ejercicio: Un método sin medicamentos para bajar la presión arterial alta. Mayo Clinic. Julio, 2021.

³ Factores de riesgo y deporte. Fundación Española del Corazón. Consultado en noviembre, 2021.

⁴ Prevención de la obesidad desde la actividad física: del discurso teórico a la práctica. Asociación Española de Pediatría. Agosto, 2012.

⁵ Prevención de la diabetes tipo 2 mediante alimentación y ejercicio. Fundación para la diabetes. Noviembre, 2011.

⁶ El ejercicio y el estrés: ponte en movimiento para controlar el estrés. Mayo Clinic. Agosto, 2020.