Pulpitis palmar de las piscinas: qué es y cómo abordarla
En este post vamos a explicar qué es la pulpitis palmar de las piscinas, por qué se produce y cómo se puede prevenir y tratar.
La pulpitis palmar de las piscinas, también conocida como dermatitis palmar juvenil de las piscinas, es una afección cutánea benigna que aparece casi exclusivamente en niños y está relacionada con la permanencia prolongada en una piscina1.
¿Qué es la pulpitis palmar de las piscinas?
La pulpitis palmar de las piscinas es una dermatitis irritativa de contacto, que se produce por la fricción reiterada con superficies ásperas como, por ejemplo, el borde de las piscinas. Se caracteriza por la aparición de máculas o lesiones eritematosas y brillantes en las yemas de los dedos y, con menor frecuencia, en las plantas de los pies. Estas lesiones pueden ser rojizas o violáceas y no son descamativas ni producen picor1,3.
Causas de la pulpitis palmar de las piscinas2,3
En el origen de la pulpitis palmar de las piscinas pueden intervenir varios factores:
- Normalmente está causada por el roce reiterado de los dedos húmedos con superficies ásperas y rugosas, como el borde o el fondo de la piscina. El motivo por el que prácticamente no se produce en adolescentes y adultos es que los niños tienen la piel más frágil.
- Los niños suelen permanecer más tiempo en la piscina, lo que favorece la hiperhidratación de la capa córnea de la piel que, a su vez, favorece la aparición de la pulpitis palmar.
- No está relacionada con los productos químicos presentes en el agua de las piscinas. Puede producirse tanto en piscinas al aire libre como en piscinas cubiertas, y en cualquier época del año.
- Otros factores, como padecer dermatitis atópica, también influyen en la aparición de pulpitis palmar.
Diagnóstico de la pulpitis palmar1,2
El diagnóstico de la pulpitis palmar de las piscinas es sencillo, pudiendo realizarse a través de la exploración clínica, por las características de las lesiones y por su asociación a una actividad reciente y prolongada en piscinas; por lo que no es necesario realizar ninguna prueba complementaria, salvo que se sospeche que se puede tratar de otra enfermedad de la piel como la dermatitis plantar juvenil clásica o la hidradenitis palmoplantar idiopática, que también están asociadas a la actividad física intensa y al ambiente húmedo.
Tratamiento y prevención de la pulpitis palmar1,2
El tratamiento de la pulpitis palmar de las piscinas también es sencillo. Basta con suspender las actividades acuáticas que han causado la aparición de las lesiones para que desaparezcan de forma espontánea y sin secuelas.
La prevención de la pulpitis palmar consiste, sencillamente, en limitar el tiempo que los niños permanecen en la piscina.
En conclusión, se trata de una afección leve y benigna, pero poco conocida, que podría estar infradiagnosticada. Es importante conocer su existencia y sus características para evitar alarmas innecesarias y poder resolverla de manera sencilla.
Además, si eres asegurado de Adeslas, recuerda que tienes disponible nuestro Servicio de Orientación Médica Infantil, donde podrás obtener más información.
Referencias:
1Pulpitis de las piscinas asociada a exantema por parvovirus. Scielo. Marzo, 2019.
2Dermatitis palmar juvenil de las piscinas. AEPAD. Consultado en mayo, 2023.
3Pulpitis palmar de las piscinas: un diagnóstico que hay que considerar. Revista Pediatría atención primaria. Mayo, 2019.
