Lo que debes saber sobre el Baby Led Weaning (BLW)
En este post vamos a explicar en qué consiste el baby led weaning dentro de las opciones de alimentación complementaria del bebé a partir de los seis meses de edad y también comentaremos sus beneficios y riesgos.
A partir de cierto momento, los bebés deben empezar a incorporar otros alimentos a su dieta, además de la leche materna o de fórmula1. El inicio de la alimentación complementaria se considera un período trascendental en el desarrollo infantil, ya que es indispensable garantizar que se cubran los requerimientos energéticos y nutricionales para el crecimiento. Este momento suele estar cercano a los seis meses de edad1-3.
Existen diferentes enfoques sobre cómo establecer esta alimentación complementaria. Algunos de ellos, como el baby led weaning (BLW), ofrecen cierta libertad al bebé para que él mismo manipule y se lleve a la boca diversos alimentos, aprendiendo a comer sin la intervención directa de un adulto e incorporando a su dieta alimentos sólidos sin pasar por las clásicas papillas o purés4.
Este método posee beneficios y riesgos, pero su utilización en los casos adecuados puede ser positiva nutricionalmente y, especialmente, a la hora de promover una buena adquisición de hábitos de alimentación durante la infancia2,5.
¿En qué consiste el método BLW?2,4-6
Baby led weaning significa "destete dirigido por el bebé", refiriéndose a la introducción de alimentos complementarios a la leche materna o de fórmula, cuando el aporte nutricional de esta comienza a ser insuficiente para el desarrollo infantil.
Se trata de un método de alimentación autorregulada en el que el propio bebé tiene acceso a alimentos del menú familiar, con pequeñas adaptaciones, sin pasar por las papillas y los purés convencionales.
También hay padres que optan por un BLW mixto, donde permiten al bebé explorar los alimentos y le ofrecen algún triturado en alguna de las comidas, algo que no es incompatible con este método.
El método permite la incorporación de alimentos sólidos para que el bebé de forma autónoma utilice las manos y pueda explorar y reconocer formas, texturas, colores, olores y sabores, estableciéndose así una relación más natural con la comida. También se fomenta la coordinación, la autorregulación y se pone en marcha de forma temprana el proceso de masticación.
¿Cómo comenzar con el baby led weaning?2-4
El método BLW permite en esta nueva etapa de la alimentación infantil la introducción de una dieta variada y nutritiva que incluya alimentos de todos los grupos en su formato original.
Un elemento importante es la disposición física del bebé, que necesitará de una trona o silla adaptada donde pueda estar erguido junto a la mesa para compartir el menú familiar. Con esta forma de alimentación el bebé irá participando e integrándose en el entorno familiar, actuará por imitación y a la vez irá desarrollando la habilidad de masticar y deglutir alimentos sólidos.
Existen algunos requisitos previos para que este tipo de alimentación complementaria se pueda poner en marcha. Uno de ellos es que el reflejo de extrusión haya desaparecido. Este reflejo automático, presente en los primeros meses de vida, hace que el bebé expulse hacia afuera el alimento introducido por medio de movimientos con la lengua.
También es preciso un desarrollo psicomotor adecuado, teniendo la capacidad de mantenerse sentado con apoyo, coger los alimentos con las manos y llevárselos a la boca.
Finalmente, es importante que el niño tenga interés activo por la comida, es decir, que sea "buen comedor".
En definitiva, este método de alimentación será idóneo en algunos casos, por lo que se hará necesario evaluar las características individuales del bebé antes de ponerlo en práctica.
Preparación de alimentos en el BLW2-4,7
La introducción de nuevos alimentos debe ser progresiva, con cantidades pequeñas, presentando los alimentos de uno en uno y debiéndose prestar especial atención a aquellos potencialmente alergénicos (fresas, huevo, pescado, etc.).
La alimentación complementaria no es sustitutiva, de ahí su nombre. La leche, materna o de fórmula, sigue siendo fundamental, por lo que se seguirá ofreciendo pecho o biberones y se irá complementando con los alimentos que se vayan introduciendo. Para los niños no amamantados, a partir de los 6 meses de edad se recomienda cambiar a la fórmula de continuación.
En cuanto a los alimentos incluidos en el método BLW, deben contemplarse las siguientes especificaciones:
- Frutas y verduras crudas. Ofrecer aquellas que sean blandas. Deben servirse cortadas en trozos pequeños: pera, plátano, naranja, mango, ciruela, aguacate, pepino, etc.
- Verduras cocinadas. Pueden ser hervidas, al vapor, salteadas, etc., de forma que sean fáciles de comer para el bebé. Pueden estar enteras (judías verdes, ramitos de brócoli o coliflor) o cortadas en trozos del tamaño de un dedo, en forma de "palitos" (calabacín, zanahoria, calabaza, patata, berenjena, etc.). La temperatura debe ser adecuada para ser manipuladas sin riesgo.
- Cereales y derivados. Se pueden incluir trozos de pan, bolas de arroz, arroz cocinado, mini sándwiches con queso de untar, jamón cocido, etc., pasta, copos de cereales, etc.
- Legumbres. Hervidas o guisadas.
- Carne y pescado. Pequeñas cantidades cocidas o guisadas cortadas en pequeños trozos manipulables, desmigadas o en finas tiras. Con el pescado hay que asegurarse de que no haya espinas.
- Huevo. Se puede presentar cocido o en tortilla y partido en trozos.
- Grasas. Se pueden condimentar las verduras y legumbres con aceite de oliva u otros aceites vegetales.
Finalmente, deben evitarse los alimentos que pueden dar lugar a atragantamientos como frutos secos enteros, trozos de manzana y zanahoria crudas, uvas enteras, palomitas, aceitunas enteras, salchichas cortadas en rodajas, etc.
Beneficios y riesgos del baby led weaning4-6,8,9
En estos momentos, no existe consenso entre los pediatras y expertos en nutrición, y tampoco se dispone de una evidencia científica sólida que permita señalar a este método de alimentación como superior a otras formas de alimentación infantil. Sin embargo, sí parece claro que puede resultar positivo en función de las características del niño, pudiendo mejorar determinados parámetros de la alimentación en esta etapa.
Algunos de los beneficios que se pueden derivar de la alimentación complementaria dirigida por el bebé incluyen:
- Fomenta la independencia y autonomía en las comidas.
- La ingesta de alimentos pasa a estar gobernada por los estímulos de hambre y saciedad del propio bebé.
- El bebé participa desde los 6 meses en las comidas familiares, por lo que acelera su integración.
- Comodidad para la familia. El bebé come los mismos alimentos que el resto de la familia, con pequeñas adaptaciones.
- Este tipo de alimentación determina una mayor variedad de alimentos para el bebé y un menor gasto económico para las familias.
- Se produce una estimulación y desarrollo temprano de los sentidos, con el descubrimiento de texturas, colores, olores y sabores.
- Este método puede determinar la adquisición de buenos hábitos alimentarios y una mayor calidad nutricional de la dieta.
- El bebé come a su ritmo y nunca se le fuerza. Esto disminuye considerablemente los conflictos con las comidas.
- Permite evitar los principales problemas de la alimentación infantil convencional (exceso de azúcares añadidos, sal y alimentos procesados).
- Todo ello puede contribuir a prevenir el sobrepeso y la obesidad.
Por otro lado, el BLW también presenta ciertos riesgos y contratiempos a la hora de ser llevado a la práctica. Algunos estudios señalan la posibilidad de un aporte energético insuficiente y de deficiencias en algunos nutrientes como el hierro y el zinc, si bien existen investigaciones recientes que lo contradicen5. Es probable que este hecho esté relacionado con la inadecuada elección de este método en casos en los que las características del bebé no lo hagan aconsejable.
Otro de los riesgos existentes es el posible atragantamiento y asfixia, por lo que es recomendable estar pendiente del bebé, no dejándole solo y teniendo conocimiento de cómo actuar frente a este tipo de situaciones. Sin embargo, los estudios que evalúan el atragantamiento no encuentran diferencias entre los diferentes tipos de alimentación complementaria9. En cualquier caso, dado que este método está pensado para que el bebé participe en las comidas familiares, se supone que siempre comerá acompañado.
Finalmente, uno de los problemas que encuentran algunas familias a la hora de implementar este método es la falta de conocimiento y formación por parte de algunos profesionales de la salud y la presión social y familiar que muchas veces actúa en contra9.
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Referencias:
1Alimentación del lactante y del niño pequeño. Organización Mundial de la Salud. Diciembre, 2023.
2Alimentación desde los 6 meses y baby-led weaning (BLW): qué saber. UNICEF. Mayo, 2023.
3Recomendaciones de la Asociación Española de Pediatría sobre la alimentación complementaria. Asociación Española de Pediatría. Noviembre, 2018.
4Alimentación complementaria dirigida por el bebé. Asociación Española de Pediatría. En Familia. Noviembre, 2017.
5The effect of baby-led weaning and traditional complementary feeding trainings on baby development. Journal of Pediatric Nursing. [ABS]. Noviembre, 2023.
6Baby-led weaning: Health professionals 'knowledge and attitudes and parents' experiences from Spain. A mixed methods approach. Health and Social Care in the Community. Septiembre, 2021.
7Alimentación del lactante sano. Protocolos diagnósticos y terapéuticos en pediatría. Asociación Española de Pediatría. Consultado en enero 2024.
8The cost of baby-led vs. parent-led approaches to introducing complementary foods in New Zealand. European Journal of Clinical Nutrition. Marzo, 2020.
9Experiences and opinions towards baby-led weaning by healthcare professionals. A qualitative study. Pediatric Research. Junio, 2023.